viernes, 9 de noviembre de 2012

Nox / Venus | Primera Parte: La Perspectiva de Venus

Ilustración por Takato Yamamoto
Que mañana radiante me ha recibido. La brisa fresca hace el perfecto equilibrio con los tímidos rayos que erizan mis vellos y alimentan el creciente cosquilleo en mis pechos. No me canso de perseguir y contemplar los amaneceres.
Bueno, en realidad hay días en que sí, pero no tengo otra opción.

Mi nombre... ya lo olvidé y en realidad, no importa. No tengo contacto humano directo hace una década o más. Los recuerdos se han difuminando hasta terminar como manchas de insectos en el parabrisas.

En todo el mundo me conocen como Venus y no es exactamente por mi belleza resplandeciente.

Está bien, ostento una belleza resplandeciente, pero eso es parte de la mitad de mi vida. El resto del tiempo soy un monstruo multi-forme, multi-óptico, multi-fálico y asesino múltiple.

Cuando el atardecer se transforma en noche, mi cuerpo que, iluminado directamente por los rayos solares se mantiene con mi apariencia femenina, pierde toda consistencia.

Es por ello que debo desplazarme a través del mundo, escapando del anochecer para evitar transformarme en él, en Nox.
Todo comenzó sin previo aviso. Solo desperté desnuda, el cuerpo cubierto por una viscosidad que me cegaba. Me sentía agotada, como si me hubiese dedicado a repetir el test de Cooper una y otra vez durante toda la noche.

Hay momentos en que pienso que nos separaremos completamente, que llegará la noche y podré mantener mi forma, mi personalidad y caminar por las calles libremente, iluminada por un farol, cenar a la luz de una vela, o solo dormir. Pero luego, de casualidad me encuentro con un televisor mostrando 
imágenes de archivo del último ataque de Nox, de como diezma ciudades completas. Incluso una vez cometí el error de buscar en internet videos aficionados y me encontré con una toma demasiado cercana, donde Nox... no pude terminar de verlo, solo llegué hasta el momento en que le abre las mandíbulas a la niña. Según la descripción, la partió en dos de forma vertical. Desde ese día no me he acercado persona alguna.
Luego de escenas como esa, termino convenciéndome de que mi cerebro se freirá, derretirá y terminará mezclándose con su repugnante piel líquida. Esta sensación ha crecido en el último tiempo, ya que en las pocas ocasiones que he logrado dormir un poco en alguna cueva encumbrada en solitarias montañas, al despertar encuentro rayados hechos por mi propia mano. Nox está encontrando una brecha en el día.

El último mensaje que dejó me causa terror, porque estoy segura que quiere manipularme.

"AYÚDAME".